Un insólito hecho tuvo lugar en la ciudad de Ramos Mejía, La Matanza. Un hombre se acercó a una farmacia a comprar ibuprofeno, para su hijo de 7 años. Sin embargo, el farmacéutico habría confundido su petición, y le vendió Viagra en su lugar. El pequeño sufrió una intoxicación y terminó hospitalizado.

Por suerte, el niño fue trasladado con la rapidez necesaria a un nosocomio de la zona. «Se puso rojo y empezó a vomitar«, dijo Eduardo Padilla, padre del pequeño. Su hijo sufrió los efectos secundarios de la pastilla, quedando en observación por 24 horas, y luego recibió el alta. “Ahora estamos esperando que avance la investigación”.

Padilla, de origen venezolano, pero residente de nuestro país hace años, se había acercado el lunes a la droguería y, según sus palabras, pidió ibuprofeno. Sostiene, además, que pidió en comprimidos masticables, de presentación infantil, ya que eran para su hijo pequeño.

La empleada atribuyó todo a una confusión. La joven afirmó que pensó que el hombre le había pedido “en clave” un medicamento para la disfunción eréctil“Muchas veces, por pudor, los clientes lo piden así. No dijo que quería un remedio para niños”, se excusaron desde la farmacia. Eso sí, se negaron a responder por qué, más allá del error que puso en riesgo la vida de un nene, vendieron el medicamento sin recetaalgo que está penado por la ley.