A partir del próximo lunes 1 de abril, los conductores argentinos se enfrentarán a un nuevo golpe en sus bolsillos. Y es que se espera un incremento de alrededor del 5% en los precios de los combustibles. Este aumento afectará principalmente a la nafta súper, que podría llegar a costar alrededor de 840 pesos por litro, según las estimaciones.

El motivo detrás de este aumento radica en un incremento en el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL). El cual será trasladado al precio final por las empresas refinadoras del país, incluyendo a gigantes como YPF, Shell, Axion y Puma Energy. Aunque cada una de estas empresas tiene la autonomía para decidir el porcentaje de aumento, en la práctica suelen alinearse con la estatal YPF. Ya que es la principal referente del mercado.

El sitio web Surtidores ya ha anticipado estos cambios, indicando que actualmente el precio de la nafta súper en YPF ronda los $800 en CABA. Con un incremento del 5%, este precio subiría hasta los $840, lo que representa un impacto significativo para los consumidores y agrega presión a un contexto económico ya complejo. En Tucumán, se espera un precio alrededor de los $900, debido a los agregados como el costo logístico.

Esta noticia ha generado expectativa y preocupación entre los conductores, quienes probablemente verán largas filas en las estaciones de servicio durante el fin de semana previo al aumento. Mientras buscan llenar sus tanques antes de que entren en vigencia los nuevos precios.