A pocas horas del inicio del campeonato mundial Sub-20 en nuestro país, integrantes de la delegación de Irak protagonizaron un escándalo que puede tener consecuencias deportivas, si es que la FIFA considera sancionarlos. Pero lo más grave es que fueron acusados de abuso sexual por una empleada del hotel «Dazzler» ubicado en la ciudad de La Plata. La víctima podría presentar una denuncia penal si así lo decidiera.

Una vez que la empleada del hotel dio a conocer el ataque sufrido, las autoridades del edificio informaron a la Policía Bonaerense y efectivos se presentaron en el lugar, ubicado en la calle 54 entre 13 y 14 de la capital bonaerense. Allí, según el informe policial, la mujer manifestó que«le habían tocado una parte íntima», y luego aseguró que «no iba a realizar ningún tipo de denuncia penal».

Además, otros miembros del personal del hotel también revelaron comportamientos indebidos por parte de los iraquíes, tales como moverse por los pasillos y la recepción en ropa interior, inundar habitaciones, activar el sistema de alarma de incendios a propósito y romper un ascensor por sobrepeso, entre otros desmanes. Incluso, integrantes de la seguridad del edificio afirmaron, ante los policías, que vieron maltratos hacia una traductora.

Posteriormente, luego de registrar las denuncias, traductor mediante, la Policía habló con los responsables del plantel de Irak y los informó al respecto de las acusaciones. A su vez, desde el Comité Organizador Local y de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) también pidieron un informe de los hechos.

Luego de que se produjera la difusión de lo ocurrido, la Federación de Irak publicó un comunicado e intentó desligarse de los incidentes. La delegación iraquí cuenta con 48 personas en total y se encuentra a la espera de su debut oficial en el mundial, el cual se producirá el próximo lunes 18, ante el seleccionado de Uruguay.